Palabras del Director Nº 133 - Enero 2013 - Año XII

Estimados amigos:

Con las bendiciones de la Santísima Virgen, iniciamos un nuevo año colmado de esperanzas y de aprensiones. Esperanzas alimentadas por la certeza del cercano triunfo del Inmaculado Corazón de María. Aprensiones que surgen de la tremenda crisis moral, familiar y religiosa en la cual se debate nuestra civilización y que está alcanzando parangones hace algunos años imprevisibles.

A cada minuto nos llegan torrentes de información: noticias buenas, algunas neutras y muchas malas. Pero que es indispensable ordenar y clasificar, para que nuestras alegrías y nuestras preocupaciones estén acordes con los pensamientos que un buen cristiano está llamado a tener en nuestros días. Siguiendo el modelo de María Santísima, de la cual las Sagradas Escrituras dicen que «conservaba todas estas cosas, meditándolas en su corazón» (Lc. 2, 19).

A lo largo del camino de este nuevo año, mes a mes, estarán acompañados por la selecta y provechosa lectura que los Tesoros de la Fe les ofrecen desde hace doce años. Contribuyendo así, desde las filas seglares, con nuestro grano de arena para acrecentar y fortalecer la fe católica, apostólica y romana de nuestras familias.

Pidamos, pues, a la Divina Providencia y a la Bienaventurada Virgen María, que las gracias germinativas que brotaron el pasado año en todo el mundo se intensifiquen y prevalezcan sobre los movimientos disgregadores y fautores del desorden, que pretenden establecer la anarquía y el caos universales. Aunque para ello tengamos que pasar por los acontecimientos purificadores anunciados por Nuestra Señora en Fátima.

En Jesús y María,

El Director
Los premios y castigos públicos ¿dignifican y estimulan? o ¿corrompen y hum La caridad no justifica el compromiso
La caridad no justifica el compromiso
Los premios y castigos públicos ¿dignifican y estimulan? o ¿corrompen y hum



Tesoros de la Fe N°133 enero 2013


Consejos de la VirgenConfiados a Don Bosco para formar a la juventud
Nº 133 - Enero 2013 - Año XII La caridad no justifica el compromiso ¿Nunca es lícito juzgar a los demás? Consejos de la Santísima Virgen para formar a los jóvenes Nuestra Señora del Buen Socorro Conservar la paz en las dificultades San Basilio Magno ¿Por qué Dimas, “el buen ladrón”, fue canonizado por la Iglesia? Los premios y castigos públicos ¿dignifican y estimulan? o ¿corrompen y humillan?



 Artículos relacionados
Del amor eterno de Dios hacia nosotros A partir de esta edición publicaremos una serie de trechos seleccionados, extraídos del libro «Pensamientos Consoladores de San Francisco de Sales» —Doctor de la Iglesia y Patrono de los periodistas católicos; uno de los autores ideales para elevar las almas a la perfección espiritual— recopilados...

Leer artículo

Rothenburg La sociedad en la Edad Media se dividía en tres clases. La más alta de ellas era el Clero, porque estaba constituida por personas consagradas a Dios, integrantes de la estructura de la Iglesia Católica Apostólica Romana...

Leer artículo

Banquete de bodas en Yport Dos rudas lonas colgadas de los manzanos improvisan el salón de banquetes de esta familia de Normandía en medio de su huerto...

Leer artículo

Actos sacrílegos y blasfemos apremian la necesidad de reparación Estupor, indignación y ánimo de reparación. Es lo que siente un católico al tomar conocimiento del sacrílego atentado perpetrado el 18 de abril pasado contra la imagen de la Santísima Virgen del Carmen, que fuera coronada canónicamente en 1926 como Reina y Patrona de Chile, en nombre del Papa Pío XI...

Leer artículo

La carta Un cardenal romano lee una carta, mientras que en una actitud respetuosa el fraile franciscano que la ha traído espera la respuesta...

Leer artículo





Promovido por la Asociación Santo Tomás de Aquino