Plinio Corrêa de Oliveira En esta foto del ícono de Nuestra Señora de Vladimir –de auténtico estilo bizantino– la Virgen Santísima Santísima se presenta en una actitud de alma plenamente vuelta hacia lo interior, en queElla toma consciencia profunda del estado de espíritu de sumo afecto, suma protección y, al mismo tiempo, de tristeza; pero de tristeza en un estado de deleite de ser Ella misma. Hay dentro de sus ojos una luz parecida con la que existe al interior de una catedral, una especie de penumbra. Evidentemente, lo que la absorbe por entero es el Niño Jesús. Se nota el bienestar y el absoluto consentimiento en sentirse enteramente asumida por el amor a Él. Pero al mismo tiempo está presente el presagio de la Cruz, de todos los abandonos, incomprensiones, negaciones que vendrían. En vista de ello, de algún modo Ella ya sufre, pero coloca en su Divino Hijo toda su complacencia. Este estado de espíritu, el Niño Jesús lo siente en comunicación con Ella, que lo va transmitiendo al Hijo. Éste desea absorber mucho más tal estado de espíritu aproximando su rosto al de Ella, como quien dice "Esto es lo que yo quiero, deme más". Su Madre Santísima se deleita en transbordar aquello y Él se deleita en recibir ese afecto. Un fenómeno especialmente rico de una intimidad recíproca, un bienestar en la tristeza, en el cariño y en el recogimiento. Todos estos aspectos quedan realzados por el fondo dorado del ícono. En medio de la tristeza, hay una nota de esperanza como una estrella naciente. Esto caracteriza la templanza. No es una tristeza desesperada. ¡Es la Virgen de la Ternura! Así se podría denominar este ícono.
|
Santa Teresa de Jesús V Centenario de su nacimiento (1515-2015) |
|
La actitud católica frente a la muerte y la concepción materialista de la vida El espíritu del mundo no comprende estas cosas, y por eso adopta con relación a la muerte actitudes completamente diferentes de la que es propia del genuino católico... |
|
Una visita a Genazzano Cuando el autobús que me llevaba a Genazzano se alejó del ajetreado y angustioso tráfico del centro de Roma y pasó por delante de Porta Maggiore, me alegró ver que no llevaba ni un solo turista. Después de varios meses viviendo en Roma, me había acostumbrado a verlos por todas partes... |
|
El inmenso sufrimiento de la Santísima Virgen Entre el Hijo y la Madre tenía que haber comunidad perfecta de sufrimiento. Cuando ve una madre padecer a su hijo, ella padece con él y siente de reflejo todo lo que él padece; lo que Jesús padeció en su cuerpo, María lo padeció en su corazón, por los mismos fines y con la misma fe y el mismo amor... |
|
El Aristócrata y la Granfina Lady Diana Cooper descansa junto a una estatua en los jardines del castillo de Chantilly, histórica mansión de los Príncipes de Condé... |
|
Qué grande es el poder de la oración TODA MI FUERZA se encuentra en la oración y en el sacrificio; son las armas invencibles que Jesús me ha dado, y logran mover los corazones mucho más que las palabras. […]... |
Promovido por la Asociación Santo Tomás de Aquino