Hacer que los hombres conociesen más y más a Jesucristo y con un conocimiento que no se parase sólo en la fe, sino que se tradujera en las obras de la vida, esto es lo que se esforzó en hacer con todo el empeño de su corazón el Apóstol. Por eso enseñaba de tal manera los dogmas y preceptos todos de Cristo, que nada callaba ni mitigaba sobre la humildad, la propia abnegación, la castidad, el desprecio de las cosas humanas, la obediencia, el perdón de los enemigos y otras cosas semejantes. Y sin timidez declaraba cosas como estas: que es preciso elegir entre Dios y Belial, pues al mismo tiempo no se puede servir a entrambos; que a todos después de la muerte les aguarda un tremendo juicio; que no se puede transigir con Dios; y que hay que esperar la vida eterna si se cumple toda la ley, así como, por el contrario, si se condesciende con las pasiones y se abandona el deber, hay que esperar el fuego eterno. Porque nunca creyó el predicador de la verdad que debía abstenerse de tales materias, por parecer demasiado duras a quienes hablaba, a causa de la corrupción de los tiempos.
BENEDICTO XV, encíclica Humani Generis Redemptionem , del 15 de junio de 1917.
|
Las apariciones del Ángel de la paz Apremiante llamado a la seriedad |
|
Un secreto... es un secreto La mañana del 14 de junio, temprano, partieron madre e hija para Fátima, María Rosa delante todo el camino hasta llegar a la casa de los Marto. Allí se detuvo la madre para aliviar su pena con tía Olimpia, y mientras tanto Lucía, llorando amargamente, cambió unas pocas palabras con Jacinta... |
|
El Velo de la Verónica Una consulta que me formularon al respecto, despertó en mí una antigua curiosidad: ¿dónde está el Velo de la Verónica? ¿Se habrá salvado de las tempestades de la historia? Si está en algún lugar, ¿por qué no se habla de él?... |
|
Ambientes y formación moral Por motivos que no son apenas convencionales, ciertos colores, ciertas líneas, ciertas formas de objetos materiales, ciertos perfumes y ciertos sonidos tienen afinidad con estados de espíritu del hombre... |
|
¿Qué eres Dios mío? ¿Qué eres, pues, Dios mío? ¿Qué eres, vuelvo a preguntarte, sino el Señor Dios? Porque, ¿quién es Dios fuera del Señor, quién es Roca fuera de nuestro Dios?... |
|
Para qué fuimos creados El cuerpo me dice qué soy, pero no quién soy. El quién es propio del alma. El cuerpo me dice que estoy hecho de carbono, oxígeno, nitrógeno, calcio, hierro, etc. Pero la personalidad, la simpatía, la cordialidad, la amabilidad, la sinceridad, el orgullo, la soberbia, la mentira, el odio, la venganza, son defectos y virtudes espirituales... |
Promovido por la Asociación Santo Tomás de Aquino