Palabras del Director Julio de 2021 – Año XX

stimados amigos:

Entre la Iglesia y el Estado: ¿unión o separación?

Plantear tal problema es lo mismo que inquirir por la pertinencia de la unión entre el alma y el cuerpo. Es evidente que el cuerpo sin el alma no subsiste, muere y se descompone. León XIII nos responde de forma concisa: “La Iglesia sin el Estado es un alma sin cuerpo. El Estado sin la Iglesia es un cuerpo sin alma”.

Debido al relativismo de los tiempos modernos, hasta los principios más evidentes están siendo erosionados, discutidos, negados y olvidados. Así, la doctrina católica sobre la unión entre la Iglesia y el Estado es permanentemente cuestionada por los partidarios del laicismo.

Por ello, el asunto es de vital importancia para los católicos, pues en la actualidad no faltan quienes predican la imposición del Estado laico, el divorcio entre la Iglesia y el Estado, la supresión de la enseñanza religiosa y de las oraciones en las escuelas, la eliminación de los días festivos en el calendario y la remoción de los símbolos católicos de lugares públicos.

En el presente Tema del Mes se demuestra cómo el orden espiritual no tiene nada de contradictorio con el orden temporal; sino que más bien, deben complementarse armoniosamente, como ocurre con el alma y el cuerpo.

Esto no significa que al defender en tesis la unión entre la Iglesia y el Estado, la anhelemos en la práctica hoy en día. El régimen de unión para los poderes espiritual y temporal es el ideal; pero dadas las circunstancias concretas de nuestros días, tal régimen podría generar en muchos casos problemas aún más graves a la sociedad humana.

Roguemos a la Divina Providencia para que suscite las condiciones necesarias a fin de que una efectiva y feliz unión entre la Iglesia y el Estado pueda darse de modo fructuoso. Lo que por cierto ocurrirá con el triunfo del Inmaculado Corazón de María, profetizado en Fátima.

En Jesús y María,

El Director

El altar de san Ignacio de Loyola en la iglesia de Il Gesù Penitencia, perdón y esperanza para un mundo devastado por el pecado
Penitencia, perdón y esperanza para un mundo devastado por el pecado
El altar de san Ignacio de Loyola en la iglesia de Il Gesù



Tesoros de la Fe N°235 julio 2021


Las relaciones entre la Iglesia y el Estado A la luz de la doctrina católica
Julio de 2021 – Año XX Penitencia, perdón y esperanza para un mundo devastado por el pecado La Religión en las Constituciones que han regido en el Perú Calendario del Bicentenario - Julio 2021 Iglesia y Estado: ¿unión o separación? San Aarón El altar de san Ignacio de Loyola en la iglesia de Il Gesù



 Artículos relacionados
Santa Melania la Joven Ante la amenaza que pendía sobre Roma a partir del año 408, con los bárbaros en el horizonte, muchas familias ilustres comenzaron a abandonar la Ciudad Eterna y buscar refugio en las provincias...

Leer artículo

Canonización de Francisco y Jacinta Marto Declaramos y definimos como santos a los beatos Francisco Marto y Jacinta Marto, y los inscribimos en el catálogo de los santos, estableciendo que, en toda la Iglesia, sean devotamente honrados entre los santos...

Leer artículo

Nuestra Señora de la Guardia Patrona de Génova Ejemplo de cómo debemos preocuparnos más con lo que Dios quiere de nosotros, y menos con lo que dicen los otros. Lo que importa es la obediencia a Dios, no la opinión de los hombres...

Leer artículo

Las parábolas de Jesús Las parábolas son ejemplos, o símiles, tomados de lo que generalmente acontece entre los hombres. Se usaba mucho en la antigüedad, especialmente entre los judíos; y el Salvador se sirvió con frecuencia de ellas para explicar las verdades de la fe...

Leer artículo

Después de la Crucifixión, el triunfo de nuestro Redentor En el momento mismo en que Jesús rindió el último suspiro, una revolución súbita trastornó toda la naturaleza. El último grito del Dios moribundo resonó hasta en los abismos...

Leer artículo





Promovido por la Asociación Santo Tomás de Aquino